Los vientos alcanzan los 104 km/h en el Cabo Busto (Valdés) l El mal tiempo sigue hoy con nieve a mil metros y temperaturas bajas, similares a las de ayer
Oviedo, L. Á. VEGA
El mal tiempo que no vino en el invierno se ha presentado en esta primavera pasada por agua y frío. La costa fue batida por grandes olas, que superaron los nueve metros de altura, y también se registraron fuertes rachas de viento, que alcanzaron los 104 kilómetros por hora en el Cabo Busto (Valdés), en torno a las siete de la tarde de ayer.
Pocos cambios se esperan en esta semana, en la que la cota de nieve se mantendrá, al menos hoy, jueves, en torno a los mil metros. Subirá el viernes y el sábado, para volver a bajar el domingo, lo que dificultará la circulación en las carreteras de montaña. No obstante, ayer, no fue necesario el uso de cadenas en la red viaria asturiana. La perspectiva de deshacerse de paraguas y gabardinas va para largo.
En la jornada de ayer volvieron a repetirse los parámetros de días pasados, con lluvia persistente, temperaturas por debajo de diez grados y nieve en torno a los mil metros de altura. Sin embargo, se sumaron las malas condiciones en la costa. El martes ya tuvo que suspenderse la salida del «Norman Asturias», que une Gijón con Saint-Nazaire, en Francia, debido a la mar de fondo en el golfo de Vizcaya, con olas de ocho a diez metros. Ayer, el litoral recibió el embate de olas que llegaron a superar los nueve metros (9,3 metros para ser exactos), según los datos recogidos por las boyas del puerto de El Musel. Para encontrar olas tan altas hay que remontarse a los temporales de febrero y mediados de diciembre del año pasado.
El viento también barrió con fuerza el litoral. A primera hora de la mañana se registraron rachas en el Cabo Busto (Valdés) de 85 kilómetros por hora, ampliamente superadas por la tarde, en torno a las siete, con golpes de viento que alcanzaron los 104 kilómetros por hora. La cifra es alta, aunque supone dos tercios de la máxima alcanzada durante el temporal de diciembre pasado, 159 kilómetros por hora.
Pocas variaciones se esperan para hoy, jueves, jornada en la que se mantiene la alerta naranja por fuerte oleaje y viento. Se prevén olas de cuatro a cinco metros en el litoral, que pueden ser puntualmente superiores. Los vientos, que golpearán especialmente la costa, pueden superar los ochenta kilómetros por hora. Se hace necesario, por tanto, extremar las precauciones. En cuanto a la nieve, pueden acumularse diez centímetros a partir de los mil metros de altura. Las temperaturas serán similares a las de ayer, con máximas de 11 grados en Oviedo.
El mal tiempo que no vino en el invierno se ha presentado en esta primavera pasada por agua y frío. La costa fue batida por grandes olas, que superaron los nueve metros de altura, y también se registraron fuertes rachas de viento, que alcanzaron los 104 kilómetros por hora en el Cabo Busto (Valdés), en torno a las siete de la tarde de ayer.
Pocos cambios se esperan en esta semana, en la que la cota de nieve se mantendrá, al menos hoy, jueves, en torno a los mil metros. Subirá el viernes y el sábado, para volver a bajar el domingo, lo que dificultará la circulación en las carreteras de montaña. No obstante, ayer, no fue necesario el uso de cadenas en la red viaria asturiana. La perspectiva de deshacerse de paraguas y gabardinas va para largo.
En la jornada de ayer volvieron a repetirse los parámetros de días pasados, con lluvia persistente, temperaturas por debajo de diez grados y nieve en torno a los mil metros de altura. Sin embargo, se sumaron las malas condiciones en la costa. El martes ya tuvo que suspenderse la salida del «Norman Asturias», que une Gijón con Saint-Nazaire, en Francia, debido a la mar de fondo en el golfo de Vizcaya, con olas de ocho a diez metros. Ayer, el litoral recibió el embate de olas que llegaron a superar los nueve metros (9,3 metros para ser exactos), según los datos recogidos por las boyas del puerto de El Musel. Para encontrar olas tan altas hay que remontarse a los temporales de febrero y mediados de diciembre del año pasado.
El viento también barrió con fuerza el litoral. A primera hora de la mañana se registraron rachas en el Cabo Busto (Valdés) de 85 kilómetros por hora, ampliamente superadas por la tarde, en torno a las siete, con golpes de viento que alcanzaron los 104 kilómetros por hora. La cifra es alta, aunque supone dos tercios de la máxima alcanzada durante el temporal de diciembre pasado, 159 kilómetros por hora.
Pocas variaciones se esperan para hoy, jueves, jornada en la que se mantiene la alerta naranja por fuerte oleaje y viento. Se prevén olas de cuatro a cinco metros en el litoral, que pueden ser puntualmente superiores. Los vientos, que golpearán especialmente la costa, pueden superar los ochenta kilómetros por hora. Se hace necesario, por tanto, extremar las precauciones. En cuanto a la nieve, pueden acumularse diez centímetros a partir de los mil metros de altura. Las temperaturas serán similares a las de ayer, con máximas de 11 grados en Oviedo.
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