lunes, 22 de octubre de 2012

Arancés, primera mina de carbón de España

LOS ANALES  de S. FERNÁNDEZ PERDONES
¿PUNTO DE PARTIDA PARA HISTORIADORES?
 Arancés, primera mina de carbón de España
(Arnao, Castrillón, Asturias)

por José Manuel Feito


Con el fin de no repetirnos y puesto que en la Introducción de las dos ediciones que se han hecho de los Anales aparece la biografía del autor Simón Fernández Perdones (1) nos fijaremos en el presente trabajo únicamente en probar que su manuscrito pudo ser el punto de partida para historiadores posteriores, centrándonos sobre todo en la noticia que aporta sobre la Mina de Arancés.
Desde luego que algunos autores han tenido a la vista los Anales se ve claramente ciñéndonos solo al orden de la obra resumido en los índices. Porque de algún modo, el esquema que aparece en la obra de D. David Arias, (2) es casi el mismo que el del manuscrito. Este se divide en cinco apartados. La obra de David Arias consta también de cinco apartados o capítulos y sigue prácticamente el mismo  orden.

Dice el de Fernández Perdones:
1. Origen y población  (de Avilés) (pp. 4 a 5)
2. Fueros y privilegios (pp. 6 a 50)
3. Usos y costumbres (pp. 51 a 57)
4. Acontecimientos locales (pp. 58 a 105)
5. Personajes notables (pp. 106 a 117) (3)

Y el de David Arias:
1. Primeros tiempos de Avilés
2. El Fuero de la Villa
3. Costumbres y acuerdos del Ayuntamiento
4. Últimos acontecimientos de la Villa
5. Hombres notables.

Pero es que el Marqués de Teverga, que tuvo a la vista la obra inédita de David Arias, sigue también poco más o menos el mismo esquema, desdoblando en dos el 3º de Usos y costumbres bajo el título de “Sucesos principales” y en “Sucesos políticos”, que algo de política tenía que añadir siendo precisamente él del ramo. (4)
Quedarían así los cinco, en los seis capítulos del M. de Teverga, simplificando el título:
1. Orígenes.- Primeros pobladores
2. El Fuero
3. Acontecimientos (el 4º en F. Perdones)
4. Sucesos principales (En F. Perdones: Usos y costumbres)
5. Sucesos políticos
6.-Hijos ilustres.
Y que el Marqués de Teverga tuvo el inédito de David Arias a la vista lo confiesa en el prólogo de su Historia: “… la justicia y el afecto nos llevan a consignar con gratitud, el concurso que debemos a nuestro amigo D. David Arias, autor de una “Memoria” inédita sobre la Historia de Avilés, premiada en los Juegos Florales en la villa ha tres años, manuscrito que puso generosamente a nuestra disposición, para evitarnos la molestia de leer las actas y documentos que se conservan en el archivo popular, por él estudiados, a fin de que pudiéramos ultimar nuestro trabajo en el breve plazo con que se nos pedía. No corresponderíamos a tan hidalgo proceder si no reconociésemos tan valiosa ayuda, sin perjuicio de anotar los datos por nosotros tomados en su notable obra, que el Exmo. Ayuntamiento debe publicar. Con ella llevará Avilés su concurso a la historia nacional que se está rehaciendo en el presente siglo, y proporcionará a sus hijos y a todos los asturianos el conocimiento del glorioso pasado avilesino, en tarea que iniciaron el Obispo Llano Ponte, el arcipreste Muñiz con el sabio Martínez Marina, que otros también estudiaron, pero que ninguno ultimó hasta el Sr. Arias”. (5) En la lista de historiadores que cita el prologuista de la Obra del marqués de Teverga D. Fermín Canella, incluye también a Perdones. (6). Es casi seguro que García San Miguel no conoció el manuscrito. Por tanto lo que hace es seguir el orden de David Arias que a su vez, como hemos visto, conserva el de F. Perdones.
Desde luego la obra de D. David Arias tanto en la parte documental como en el rigor, extensión y estilo literario no se puede comparar con la mucho más breve de Fernández Perdones. También difieren con respecto al Fuero aunque la postura de Perdones, atendiendo al affaire con Arias de Miranda no fue siempre muy clara.
Por otra parte, además de la división de la obra que hemos visto, hay en ambas pasajes tan parecidos que no hay duda alguna de que fueron copiados “al pie de la letra” del manuscrito escrito medio siglo antes.
Y si nos acercamos al texto y comparamos el tan conocido «Motín del maíz» que tuvo lugar en la villa en mayo de 1847, siendo secretario y Archivero del Ayuntamiento D. Simón, y por tanto autor del informe con bastante probabilidad, la coincidencia es más palmaria. Dice David Arias:
«Hermosa mañana apareció la del 27 de mayo, pero como si la naturaleza quisiese anunciar tristes sucesos, a las diez se nubló el cielo para nublarse más tarde los corazones de los avilesinos; al trasladar los sacos de maíz desde la casa de D. Calixto Carvajal al muelle, grupos numerosos de hombres, mujeres y niños manifestábanse dispuestos a no permitir la extracción...»
Sigue la descripción de la matanza y concluye:
«… Todo esto hace exclamar a un testigo presencial que desde que Avilés lleva este nombre, quizá no haya visto un día más horrible ni tan triste para sus habitantes». (7)
¿Quién pudo ser ese testigo presencial?
Veamos la versión de Fernández Perdones, a raíz de los acontecimientos:
«Amaneció el día 27 claro y despejada la atmósfera, pero sobre las diez de la mañana principió a cubrir su oscuro manto como para denotar los tristes sucesos que habían de suceder dentro de muy pocos instantes. Así se verificó, pues tratándose de trasladar desde la casa del Comisionario D. Calixto Carvajal los sacos del maíz del muelle para su embarque, se presentaron varios grupos de hombres, mujeres y niños en La Plaza dando señales de oponerse...»
Lo sucedido ya lo conocemos: los soldados disparan a quemarropa sobre la multitud con un saldo de seis muertos y numerosos heridos... y finaliza del siguiente modo:
«... Acaso desde que Avilés lleva este nombre no habrá visto un día más horrible y tan triste para sus habitantes» (8)
Es una pena que la obra de D. David Arias no prodigue más las fuentes en las que bebió, fuera de sucintas notas a pie de página y una escueta bibliografía. (9) Nada perjudicaría el innegable valor de la obra y ganaría mucho en rigor histórico.
Pero, aún tenemos un testimonio más que aporta C. M. Vigil en su obra monumental. (10) Se trata de un cuestionario científico que se solicita al Ayuntamiento avilesino en 1849. A él hace referencia en dos ocasiones. En primer lugar como Introducción histórica al Concejo de Avilés. (11)
De las respuestas dadas, enumerando hechos y curiosidades históricas de la Villa, nada se deduce más que se trata de una sucinta historia de Avilés. Sin embargo, en el mismo párrafo se hace referencia al D. 15 de la obra (12) donde de nuevo se nos recuerda: «Contestando el alcalde de Avilés D. Bernardo del Busto a un interrogatorio científico menciona los siguientes hombres célebres, naturales de la Villa y concejo...» la nómina de los quince ilustres ciudadanos coincide con la de los Anales de Fernández Perdones, no sólo en el orden y número sino hasta en la descripción de los rasgos biográficos de los mismos, usando idénticas palabras. Lo cual da a entender que, estando como estaba D. Simón por aquellas fechas de archivero secretario del Ayuntamiento fue él quien confeccionó la Memoria solicitada que sirvió a este gran investigador, el Sr. Vigil, de punto de referencia para los datos históricos de su obra sobre Avilés, al menos en la parte citada.
En el Apéndice a la Comunicación dirigida por el autor de Asturias Monumental... a la Real Academia Española en defensa de los Fueros de Avilés, septiembre de 1874 (13) y recogida como apéndice en Avilés noticias... de García San Miguel. (14)
David Arias lo cita como Apéndice también (15) se incluye entre los detractores de cierto prestigio que tuvo el Fuero al Sr. Fernández Perdones en dos artículos que vieron la luz en 1868. (16)

LA MINA DE ARANCÉS

Todo lo anterior no tiene más finalidad que reafirmarnos en la importancia del manuscrito como punto de arranque para la Historia escrita de Avilés. Un caso más, que es lo que pretendemos destacar en este trabajo, lo tenemos con respecto a la mina de carbón de Arancés- Castrillón, una mina de carbón cuyo descubrimiento y explotación se pierde en la nebulosa de siglo XVI. Aparte de documentación, para mi desconocida, donde se pudieran encontrar los informes sobre su explotación tenemos una noticia de ella en Jovellanos, ¿qué no visitó Jovellanos? Cien años después de descubierta gira una de sus visitas a la misma el día 13 de octubre, miércoles, y la escribe en el Itinerario IV, De Gijón a Avilés… de sus Diarios de la siguiente forma: “Salimos [de Avilés] con Ponte y D. José Carbayedos: camino agradable por la calzada o puente estrechísima y a orilla de la gran huerta de la Merced. Graciosa vista de la iglesia y lugar de San Martín de los Pimientos.
Santa María del Mar a la legua. Gran mina, excavación en dos partes, empezada por arriba, sin socavón ambas aguadas; veta de mucha anchura, expuesta al Norte y corre Oriente-Poniente, a dos tiros del mar; playa abierta; en buen tiempo se pudiera cargar en gabarras remolcadas hasta Avilés. Ha dado ya mucho carbón. No parece todo igual, ni todo bueno; necesita mano inteligente para el desagüe, el apuntalamiento y el ahorro de excavación.
Vuelta a Avilés; comer en casa de Ponte con D. Manuel Prada, hermano mayor de D. Andrés, D. José Carbayedos y D. Alonso de Arango. Este nos franqueó el Fuero de Avilés cuya copia sacaremos…” (17)
Por lo que apunta Jovellanos la mina, situada a dos tiros de piedra, del mar, estaba en pleno rendimiento,  excavada por dos partes tenía veta  de mucha anchura aunque no le parece de todo de gran calidad. Como siempre hace sus sugerencias en cuanto a la explotación y el transporte. No habla del puerto que o no vio o ya no existía. Otra cita a tener en cuenta es la de G. Schulz a su paso por la zona en agosto de 1836. Dice que vio en Santa María del Mar una mina con tres capas de carbón, la capa inferior apta para fraguas, la superior para hacer cal. (18) También Madoz habla de las ricas y abundantes minas de carbón en Arnao y Santa María del Mar. (Art. Avilés). De todas formas no es fácil dar con la Es difícil dar con la documentación y consultar todos los trabajos que describen sus comienzos y posteriormente su historia, que es el comienzo e historia de la mineralogía en nuestro país. Con todo hay algunas referencias en los Archivos de la Real Compañía Asturiana de minas.
Sobre nuestra mina escribía Armando Nagel: “La mina de San Juan presenta poco carbón y casi en polvo que aunque propio para fraguas tiene poca estima por dicha circunstancia, motivos porque suspendí los trabajos en ella. La de Santa María del Mar tiene ya poco combustible que extraer del reconocido y la paré también. Tengo alguna esperanza de que, continuando en ella los reconocimientos, se descubra algún banco de calidad algo diferente a la de Arnao, y más propio para fraguas y fundiciones de hierro; y cuando no sucediese así la dirección en que va la galería principal, conduce al banco de la de Arnao, cuya comunicación facilitaría a estas últimas las extracciones por ellas mucho más fáciles y menos costosas. Ve  V. que nos hallamos concretados a la Mina de Arnao.
Esta sigue bien, pues aunque alguna vez se encuentran fallas, la práctica que hay ya en ella facilita en breve hallar el banco. Según se presenta,    calculo que tendremos en dicha Mina carbón para unos diez años, después lo habrá también pero serán necesarios mayores gastos”. (19)
Aparte de estas escuetas notas no aparecen más noticias sobre la mina de Arancés. Pero todos los autores consultados dan en decir que ha sido un fraile de la orden de los carmelitas de Valladolid, llamado Fray Agustín Montero quien la descubrió siendo la primera explotación minera de carbón en Asturias y en España.

FRAY AGUSTÍN MONTERO 

La noticia la recoge Evaristo Casariego en su obra “El Marqués de Sargadelos” en los siguientes términos: “La noticia más antigua que he podido pesquisar relativa al carbón asturiano data de finales del siglo XV. Por estas fechas el fraile carmelita fray Agustín Moreno (sic), del convento de Valladolid, descubrió y hasta parece que se benefició, un yacimiento superficial en el lugar de Arancés, en el concejo de Castrillón. Tal versión que incluyen en sus libros Aramburu y otros autores, no he podido comprobarla en documentos fidedignos; pero aún en el caso de que fuera exacta, no pasó de ser un hecho esporádico y aislado y solo tiene un valor anecdótico dentro de lo que podría ser muy bien llamarse prehistoria de nuestra minería.” (20)
En nota a pie de página cita la obra de Félix Aramburu “Monografía de Asturias, Oviedo 1899”, cita al Dr. Gaspar Casals, en cuya Historia natural y médica de Asturias, cita el carbón a finales del s. XVIII sin más datos, a Simón Fernández Perdones, etc. añadiendo unos “Apuntes históricos sobre la minería asturiana, 1844, dos hojas anónimas y sin documentar.
Aramburu en su Monografía recoge también la fecha del s. XV y añade que el fraile cargó, por mandato del rey, dos navíos para Portugal, unido entonces a España, quedando la noticia ahí sin más hasta el último tercio del s. XVIII. (21)
Lo curioso del asunto es que antes que Aramburu (1899) y, lógicamente, de E. Casariego (1974), ya en 1855 Simón Fernández Perdones (1808 - 1874) da la misma noticia en sus Anales de Avilés de los que, cotejando textos, se deduce que seguramente copiaron luego historiadores posteriores, y que dice así:
“El P. Fray Agustín Montero, de la orden de carmelitas de Valladolid, fue el que descubrió la mina de carbón de piedra del lugar de Arancés, concejo de Castrillón, en un terreno propiedad de Francisco Garay, Regidor del mismo. De esta mina se cargaron dos navíos de orden de S. M. y se despacharon para el Reino de Portugal que por entonces estaba unida a España”. (22)
Como se ve la noticia fue copiada casi al pie de la letra de F. Perdones. ¿Cómo llegó el manuscrito aún sin imprimir a manos de Aramburu? Aramburu tenía tres años cuando se escribieron los Anales (1851 a 1855) ¿Copiaron ambos de una fuente común? No sé si será errata pero hay un dato que ya no casa, el situar el hallazgo el s. XV y la última frase referente a Portugal, “por entonces unida a España”: La anexión tuvo lugar en 1580, luego el descubrimiento habría que avanzarlo al s. XVI que es la fecha que cita Perdones. (23) Sin duda es errata de Aramburu que copió Casariego.
Luis Adaro Ruiz en una de sus obras recoge una serie de testimonios acerca de esta mina dignos de tener en cuenta y que dan por supuesto la existencia del descubrimiento por el citado fraile carmelita. (24) Así Salvador Fernández Penedo en un artículo dice:
“… según los documento del Archivo Nacional de Simancas, mucho antes del incendio del monte El Carbayín (merced al cual se descubrió carbón allí) y del regreso a Asturias del Cura del Viso, (el primero que puso en explotación una mina en Langreo, la mina Riera, en El Viso), concretamente el 13 de diciembre de 1569, el 11 de setiembre de 1593 y el 15 de noviembre de 1616 se habían dado licencias para beneficiar minas de hornaguera (minas de carbón de piedra) en las localidades asturianas de Arancés (Castrillón), Llaneza y Arenas (Siero)…” 
Por tanto oficialmente “se debe considerar la mina de Arancés (Castrillón) como la explotación de carbón de piedra más antigua de Asturias y de España, y la fecha del 13 de diciembre de 1569, como aquella en la que se ha de iniciar toda la historia documental y seria, sin leyendas pueblerinas, de nuestra minería del carbón… Y puestos ya a concretar, creemos a su vez justo que se considere como legítimo y efectivo descubridor de nuestra riqueza carbonífera, al nominal de la licencia real para la explotación hullera de Arancés, fray Agustín Montero carmelita descalzo, del Convento de Valladolid, natural de San Román de Naveces (Castrillón), del cual se sabe además que continuó arrancando mineral hasta (por lo menos) el 1581 ya que tal año, por mandato del Rey su Señor (Felipe II) cargó en Avilés y santa María del Mar dos navíos de hornaguera para Portugal, reino que desde algunos meses antes había quedado unido a España.” (25) Por su parte  Rafael Anes Álvarez  afirma que “Los datos que nos ofrece Tomás González, (26) señalan que desde el siglo XVI ya se explotaba carbón de piedra en Asturias: Arrancas (1530), Arones (1625) y Avilés (1655)… Pero estas fechas no concuerdan con las de Salvador Fernández Penedo en su artículo. Por lo que  Rafael Anes acude al Registro  de Tomás González  en  donde se dice lo siguiente:
“Arrancas. En San Lorenzo el Real, a 11 de setiembre de 1593. Licencia a Fray Agustín Montero, de la Orden de Nuestra Señora del Carmen de Valladolid, para que pudiese beneficiar una mina de carbón de piedra que descubrió en términos de Arancés, jurisdicción de Avilés, Principado de Asturias. (27)
Por tanto la noticia tal como nos llega por estos cauces  parece a todas luces fiable.
La cuestión ahora era conocer la identidad de este carmelita al parecer natural de Naveces. Tuve que acudir al mejor historiador de la Orden actualmente con residencia en Madrid el P. Balbino Velasco Bayón. Es autor de la “Historia del Carmelo Español”, obra en cuatro volúmenes, miembro correspondiente de la Academia de la Historia y por tanto, conocedor de su Orden como nadie. Consultó sus archivos y me dijo. “Por mis manos han pasado toneladas de documentos de la orden. En ninguno encontré a ese Fray Agustín Montero”. Me sugirió que como en Avilés existieron desde antiguo los PP Franciscano y el señor Perdones tomó los datos del Archivo posiblemente confundió la orden ya que por aquellos años estaban ya los PP. Franciscanos en Valladolid y habían alcanzado en dicha ciudad gran prestigio e influencia. Además el mundo franciscano siempre estuvo más en contacto con la naturaleza que el mundo carmelita. Y así lo había yo escrito en una primera redacción.
Pero a los pocos días recibo una llamada de Madrid, del P. Albino en el que entre asombrado y feliz me facilita un dato de suma importancia. Otro investigador carmelita que hacía un trabajo en los archivos del Vaticano cita la existencia documentada de fray Agustín. Su nombre aparece en el Archivo General de la Orden Carmelitana de Roma el día 5 de abril de 1573 con motivo del ruego que hace para dirigirse al Río de la Plata, como misionero. El General de la orden, P. Rubeo, le deniega el permiso para tal misión, pero el 30 de agosto de 1574 le concede patente para vivir en el Convento de Valladolid sin que pudiera ser removido. (28)
Esta noticia vino a ser para nosotros como su partida de nacimiento. Existió fray Agustín y fue fraile carmelita en Valladolid. A ello se puede añadir que era natural de San Román de Naveces, noticia que recoge Fernández Perdones… El por qué se dedicó al estudio y explotación de una mina, es ya más difícil de explicar aunque los datos que tenemos, bastante fidedignos, lo corroboran.
Al no poder consultar por desconocer si existen otras fuentes que hablen de Fray Agustín Montero, podemos seguir manteniendo que es F. Perdones el primero que habla de este fraile como el pionero que descubre y explota una mina de carbón en Asturias y en España, exportando su carbón a Portugal desde el desaparecido Puerto de Santa María del Mar.

José Manuel Feito

NOTAS:

(1) Simón Fernández Perdones, Anales de Avilés, edición preparada por J. M. Feito, Gijón 1988, pág. 21. Sobre el hallazgo de este manuscrito y datos biográficos del autor ver El Bollo 1987, y el prólogo de a la edición del Ayto. de Avilés, pp. 18-21. Esta segunda edición tenía como finalidad, además de recoger en facsímil el manuscrito y completar la lista de alcaldes, celebrar de alguna manera el 200 aniversario del nacimiento del autor 1808-2008. Desde aquí nuestro agradecimiento a Román Álvarez, Concejal de Cultura por su empeño en editarlo y a Benjamín Lebrato, Edit. Nieva, por su esmero en la edición.
(2) David Arias, “Historia general de Avilés y su concejo”, Avilés, 1973. Nos ceñimos a la primera edición, puesto que las restantes lo reproducen prácticamente sin más añadidos.
(3) S. Fernández Perdones y Peláez, Anales de Avilés, ms. En la transcripción pp.117 a 118.
 (4)  O. Belmunt, O, y F. Canella, Asturias, t. I Gijón 1894-1900.
(5) J. García San Miguel, Avilés, en la obra Asturias de Bellmunt y Canella, t. I, Avilés, p. 196. También en la p. 198)
(6) J. García San Miguel, o. c.,  p. X.
(7) David Arias, o. c. p. 178 y J. García San Miguel, o c. en Bellmunt y Canella, p. 238.
(8) S. Fernández Perdones, o. c. ms. p. 96.
(9) David Arias, ob. cit. «Fuentes Históricas de la Historia de la Villa de Avilés», p. 295.
(10) C. Miguel Vigil, C., Asturias Monumental, Epigráfica y Diplomática, Oviedo 1887, pp. 277-282.
(11) Ibíd., p. 271.
(12) Ibíd., p. 271.
(13) Ibíd., pp. 277-279.
(14) J. García San Miguel, J., o.c., pp. 417- 428.
(15) David Arias, o. c., p. 38 (nota).
(16) «El Faro Asturiano», Oviedo 16 y 24 de enero de 1868.
(17) Gaspar Melchor de Jovellanos, Diarios, Edición preparada por Julio Somoza, IDEA, Oviedo 1953, t. I., pág. 134.
(18) G. Schulz, Viages por Asturias, Gijón 1982, p. 14.
(19) Alberto Vilela,Avilés: carbón y veleros a través de la correspondencia de la Real Compañía de Minas”. Nota 87: CC. AHA, 26 de diciembre de 1837. El archivo de la Real Compañía Asturiana de Minas que se ha ido recuperando en la última década consta de casi un millón de documentos recogidos en unos 4.000 libros y 2.000 cajas archivadoras, de las que más de 200 son de cinc y la primera que se conserva es del año 1873. El documento más antiguo que se muestra es el que da fe del nacimiento de la Real Compañía Asturiana de Minas (RCAM) y data del 27 de noviembre de 1833. Está firmado por el primer director de la RCAM, el belga Armando Nagel, e incluye la orden de pago a los trabajadores, cuyo salario ascendía a 12 reales de vellón.
(20) E. Casariego, “El Marqués de Sargadelos” Los comienzos del industrialismo capitalista en España. IDEA, 2ª ed. Oviedo 1974, pág. 107.
(21).Félix Aramburu y Zuloaga, “Monografía de Asturias, Oviedo 1899. En la edición del “VI Centenario del Principado”, Oviedo 1989, pág. 201.
(22) S. Fernández Perdones, Anales de Avilés, ob., cit., pág. 46.
(23) S. Fernández Perdones, ob., cit., p. 46.
(24) Luis Adaro Ruiz, Jovellanos y la minería en Asturias, Gijón 2003 pp. 33 y ss.
(25) Rafael Fernández Penedo, “Ante nuestro Polo de Desarrollo Industrial: Dos antecedentes históricos. La canalización del Nalón y la Fundación de Trubia, en los finales del siglo XVIII, y el restablecimiento de la Fábrica Nacional de Cañones en mayo de 1844”.  La Nueva España, 2 de diciembre de 1969.
(26) Tomás González, Registro y Relación general de minas de la Corona de Castilla. De orden del Rey N. S., Madrid. Por don Miguel de Burgos, Año de 1832, 2 vols.
(27) Tomás González, ob. cit., vol. I, pág. 191.
(28) Pablo María Garrido, Ord. Carm. “El solar carmelitano de San Juan de la Cruz. La antigua provincia de Castilla” (1416-1836), BAC, Madrid 1996, pág. 97. 


                                          
                                                                     Juan Luis Gutiérrez Glez., testigo de haberla visto abierta de niño.

                                  


                                                                                       Boca mina tapiada desde hace algunos años.
                                                       

                                                                                           Vista general de la boca mina tapiada.

domingo, 21 de octubre de 2012

La ruta más desconocida

La senda verde del agua, que discurre desde Corvera hasta Soto del Barco, tiene un recorrido de más de 10 kilómetros por el concejo

Piedras Blancas,
Inés MONTES
El Ayuntamiento de Castrillón quiere impulsar la senda verde del agua, una de las infraestructuras medioambientales del concejo que discurre paralela al canal del Narcea y que no tiene la afluencia turística de otras zonas como la senda norte o las sendas fluviales. La inversión que acometió hace un par de años el Principado para el proyecto, cofinanciado por la Unión Europea a través del Fondo Europeo de Desarrollo Regional, superó los dos millones de euros para el tramo total de la senda verde del agua de casi 25 kilómetros y que atraviesa los concejos de Corvera, Illas, Castrillón y Soto del Barco. El tramo de Castrillón es de más de 10 kilómetros de longitud, desde Pillarno hasta las inmediaciones de La Ferrería, ya en el municipio de Soto del Barco.

Para animar la utilización de la senda verde del agua, el Ayuntamiento repartirá trípticos informativos en las oficinas de turismo y en los edificios públicos. Además, el itinerario de la ruta puede consultarse en internet ya que hay varias páginas web sobre el espacio medioambiental. La senda está habilitada para poder realizarse a pie o en bicicleta y el tiempo estimado entre El Cuadro (Pillarno) y la estación de Feve de Soto del Barco es de unas tres horas y media.

El canal del Narcea se puso en servicio en marzo de 1965 para abastecer a Ensidesa. La obra estaba diseñada para bombear 4.000 litros por segundo del río Narcea en Quinzanas (Pravia) y a través del canal el agua llegaba al pantano de Trasona, distante 27 kilómetros, en tramos que incluían túneles y acueductos.

La ruta en Castrillón arranca en El Cuadro (Pillarno) y va hacia Pipe y Meruxeas, por caminos y sendas de madera. En Meruxeras el camino sube hasta la carretera que une Llodares con Ramera de Abajo y después continúa en dirección a La Ferrería (Soto del Barco).

«El camino está bien señalizado, hay tramos de pistas, otros hormigonados o asfaltados y pasarelas de madera, la dificultad no es mucha para los caminantes o cicloturistas y el paisaje es asombrosos», sostiene responsables municipales. La senda verde del agua tiene un centro de interpretación en Molleda (Corvera) pero está destinado a otros usos desde hace tiempo.

jueves, 18 de octubre de 2012

Los arqueólogos redactan la memoria de la sexta campaña del castillo de Gauzón

Piedras Blancas,

I. MONTES

Los arqueólogos Iván Muñiz y Alejandro García, que dirigen las excavaciones arqueológicas del castillo de Gauzón, presentarán el próximo mes la memoria de la sexta campaña tras haber concluido el trabajo de campo en el Peñón de Raíces. La sexta campaña arrancó el pasado 1 de junio y en los últimos días de septiembre el equipo de arqueólogos procedió a proteger los elementos del castillo de Gauzón con plásticos para evitar que resulten afectados por los temporales del invierno.

La memoria incluirá los resultados de la prueba del carbono 14 que se están realizando a los restos de madera encontrados en unos orificios en la muralla que sirvieron para introducir las vigas durante la construcción de la fortaleza.

Además de la redacción de la memoria, el equipo de expertos está inventariando, en el laboratorio provisional ubicado en el centro de interpretación de Raíces Viejo, de las piezas encontradas en los últimos meses en el yacimiento arqueológico.

viernes, 12 de octubre de 2012

Bajo el mar

Equipo

Un equipo compuesto por doce investigadores y catorce tripulantes han participado en la última campaña de investigación en el cañón de Avilés a bordo del buque «Ángeles Alvariño». Los profesionales utilizarontecnología punta para capturar imágenes y tomar muestras a profundidades de más de mil metros. Hallaron desde juveniles de merluza a esponjas carnívoras, entre otras especies de interés.

El cañón de Avilés, guardería de merluzas

Los científicos detectan por primera vez en una sima abisal ejemplares jóvenes de pescadilla, lo que garantiza la supervivencia de la especie al concentrarse en un área libre de arrastreros

Instituto Oceanográfico de Santander (IEO) de Santander, Francisco Sánchez, que el lunes dio por finalizado el rastreo al cañón de Avilés. Sánchez explicó que este nuevo hallazgo permite explicar comportamientos de la merluza desconocidos hasta el momento. Y más importante aún: en la sima abisal avilesina los «reclusos» de merluza están a salvo de pesquerías accidentales, lo que garantiza la supervivencia de la especie.
«En la zona donde detectamos juveniles de merluza no trabajan los arrastreros, que son los que pueden dañar a esta población», sentenció el responsable del oceanográfico, que cada vez que fija sus ojos en el cañón de Avilés firma nuevos hallazgos a tener en cuenta en caso de que en el futuro el cañón de Avilés reciba protección como ocurrió en el Cachucho, la primera área marina protegida de España a unos 65 kilómetros de la costa de Ribadesella.
A falta de analizar todos los datos obtenidos en la última campaña del proyecto «Indemares», Sánchez avanzó que además de «reclusos» de merluza también han detectado la existencia en el cañón de Avilés de una «importante» población de esponjas carnívoras. «Las esponjas son organismos considerados filtradores, por eso es una rareza», explicó el científico del Oceanográfico, que también destacó la existencia de grandes extensiones de arrecifes de coral y estrellas de mar gigantes con hasta diez brazos. Y es que la biodiversidad y, por lo tanto, la producción biológica es muy alta en el valle submarino avilesino.
Los científicos han sido capaces de radiografiar la sima gracias a aparatos como el robot «Liropues 2000», el único vehículo submarino no tripulado capaz de operar a profundidades de 2.000 metros, y un sofisticado trineo fotográfico. Aún así serán necesarias nuevas campañas de investigación para desvelar nuevos secretos del cañón. «Esperamos que se siga estudiando este espacio pese a la actual situación económica y esperamos también que se hagan nuevas investigaciones en el Cachucho, que es una referencia para el cañón de Avilés y hace tiempo que no se somete a estudio», sentenció.
Las conclusiones definitivas del proyecto «Indemares» se darán a conocer en 2013. Entonces la decisión de catalogar el cañón de Avilés como área marina protegida será, principalmente, política. Hasta entonces los científicos seguirán vigilando con su robot a las merluzas en la guardería.

Los científicos han hallado en la última campaña en el cañón de Avilés esponjas carnívoras.
Los científicos han hallado en la última campaña en el cañón de Avilés esponjas carnívoras.

Los científicos que estudian el cañón de Avilés, controlando la maquinaria en una de las últimas campañas.
Los científicos que estudian el cañón de Avilés, controlando la maquinaria en una de las últimas campañas.

El cañón de Avilés es un hábitat esencial para los reproductores de importantes especies de interés comercial, como la merluza y el rape.
El cañón de Avilés es un hábitat esencial para los reproductores de importantes especies de interés comercial, como la merluza y el rape. 

jueves, 11 de octubre de 2012

«Peludín», palabra de diccionario

Cepesma aspira a que los calamares gigantes se conozcan por el nombre que les pusieron los pescadores valdesanos
A. M. SERRANO

«Tanto cuento para un peludín». Luis Laria, gerente de la Coordinadora para el Estudio de las Especies Marinas, Cepesma, escuchó el nombre «peludín» por primera vez en 1997. Ese año llegó a Luarca un ejemplar que impactó a los vecinos, pero que los marineros conocían. No había estudios sobre la especie, pero la conocían físicamente. Ahora Cepesma ha iniciado una campaña para que este nombre sea oficial, es decir, para que «peludín» pase a formar parte de los diccionarios y que este vocablo sea el nombre común del científico «Architeuthis Dux», al margen de «calamar gigante».

Los marineros de Luarca solían ver a este ejemplar cuando salían a altar mar. Es «peludín», según Luis Laria, porque la epidermis de este especie es muy sensible y cuando varaban «es como si antes fueran desprendiéndose de su piel, y en estease fijaron los marineros». «Peludín» tenía muchas capas. Este vocablo es además «muy asturiano», sostiene Laria. En Asturias «son habituales los diminutivos y llama la atención que para algo tan grande como un calamar gigante surgiera un diminutivo», comenta el coordinador de Cepesma.

La entidad sin ánimo de lucro tratará de llamar la atención sobre este hecho en otros lugares del mundo. El propio Laria ha investigado en varias zonas del planeta sobre nombres con tintes locales para el calamar gigante, «pero sin éxito. No encontré un nombre vernáculo». Y es que esta especie no es una pota ni una jibia, en el argot de cocineros, comensales y marineros. Su tamaño lo diferencia del calamar común, del molusco cefalópodo de menor tamaño que sí tiene interés culinario.

Los investigadores de distintos lugares de España que estudian elcalamar gigante también se han encontrado con que esta especie de calamar no está identificado como un vocablo en sí, sino con un adjetivo. Precisamente por tener Luarca la única colección de calamares gigante del mundo, y por ser Asturias el lugar del que parten algunas investigaciones pioneras en España sobre esta especie (como las que llevan a cabo investigadores como Marta Solé o Roger Villanueva en Cataluña), «queremos que «peludín» empiece a sonar». Es un reconocimiento que Cepesma quiere hacer a la región donde vararon tantos calamares gigantes y donde los marineros, desde principios de siglo, se preocupan por este especie en caso de avistarla desde sus barcos de pesca.

El éxito de la propuesta no será fácil, pero Cepesma ya mueve sus hilos para lograrlo. Tratará de extender el vocablo por países donde trabaja por su implicación en investigaciones científicas sobre los cefalópodos.

En Luarca, los calamares gigantes, más allá de su peso y longitud (puede medir 18 metros y pesar cientos de kilos), tienen su nombre local. No en vano en la capital de Valdés se exponen nueve ejemplares de «peludín».

Uno de los ejemplares de calamar gigante, en La Mata (Valdés).



El investigador del CSIC Ángel Guerra y el gerente de Cepesma, Luis Laria, durante una necropsia, en Luarca.

miércoles, 10 de octubre de 2012

Los reyes del bonito

La embarcación «Victoria L», del ovetense afincado en Salinas Anselmo López Acha, se alza con el triunfo en el Campeonato de Asturias de pesca de altura
Amaya P. GIÓN
Los tripulantes de la embarcación «Victoria L» son los reyes del bonito. Anselmo López Acha, ovetense afincando en Salinas (Castrillón), es el armador de este barco bautizado con el nombre del éxito y que va de victoria en victoria. El pasado fin de semana se alzó con el Campeonato de Asturias de pesca en altura con sede en el Puerto de Gijón y el grupo de López Acha atesora ya un importante palmarés. ¿El secreto? «Suerte y saber encontrar el bonito, aunque se dan muchos condiciones, como la temperatura del agua o las corrientes», explica el vencedor.

La afición a la pesca le viene a este industrial desde la juventud. «Salía a pescar con mi padre y con mi hermano. Al bonito, en concreto, empecé a salir hace unos veintidós años», relata. A López Acha se le dio bien la captura de los túnidos y fueron sus amigos quienes le animaron a competir. «Participamos en los campeonatos un grupo de cinco amigos. Cada uno desempeña una tarea y entre todos ganamos o perdemos», señala el pescador para repartir méritos.

La tripulación del «Victoria L» ha ganado dos de las tres ediciones del Campeonato de Asturias de pesca de altura (lo organiza la Federación Española de Pesca), se alzó en dos ocasiones con el Campeonato Social y también se llevó el «oro» en el concurso de altura del Club Náutico Bahía de Lastres en 2010. En la competición del pasado fin de semana, sus tripulantes pescaron 85 bonitos pequeños, el mayor de siete kilos de peso.

López Acha y compañía se han planteado en varias ocasiones dar el salto al campeonato oficial. «Lo que ocurre es que se suele organizar en Denia (Alicante) en época de trabajo. Participar requiere pasar allí al menos cinco días con todo lo que ello conlleva. Quizás el año que viene, pero con los tiempos que corren por ahora no es factible», argumentó.

La mar, la pesca, es la gran pasión del armador del «Victoria L». Que el pez pique es uno de los premios de su afición, pero las travesías son un regalo en sí mismas. «Es un placer salir de noche, ver el amanecer, y regresar a última hora de la tarde, a la vez que se pone el sol. La tranquilidad es absoluta. Y también es un gusto conocer a tripulaciones de otras embarcaciones, incluso de fuera de Asturias. La pesca es como cualquier otro deporte. Hay gente que disfruta de los paseos por la montaña. A mí me apasiona la mar», explica.

Lo que no consigue argumentar es por qué prefiere pescar túnidos a otras especies del Cantábrico. «Empecé con las lubinas pero acabé enganchándome al bonito. Otros pescan a fondo o van a los calamares», dice.

López Acha y sus amigos y compañeros de afición suelen adentrarse en la mar (a unas veinte o treinta millas de la costa) entre los meses de julio y octubre, cuando los túnidos están más próximos a la costa. «Depende de la temporada. Por ejemplo, el año pasado hubo bonitos hasta mediados de octubre, y el anterior hasta principios de noviembre», aclara este aficionado a la pesca deportiva.

La temporada de 2012 lleva a su fin y pronto habrá que guardar las cañas hasta el próximo verano. Quizá en 2013 Anselmo López Acha consiga superar su propio récord: «Hace cinco años pesqué un bonito de 104 kilos».

Anselmo López Acha, ayer, en la «Victoria L», en el puerto deportivo de Avilés.
Anselmo López Acha, ayer, en la «Victoria L», en el puerto deportivo de Avilés. 

lunes, 8 de octubre de 2012

Un alcalde en la memoria

El Ateneo Republicano homenajeó a José Fernandín al cumplirse el 74.º aniversario de su fusilamiento

Piedras Blancas,

Inés MONTES

Este mes se cumplen 74 años del fusilamiento del primer y único alcalde socialista del concejo hasta 1936. José García López, conocido como José Fernandín, fue elegido alcalde en 1931, depuesto en 1934 volvió a la Alcaldía en febrero de 1936. Durante la guerra civil española fue hecho prisionero, en octubre de 1937 por las tropas sublevadas y fusilado en el cementerio de Ceares (Gijón) en marzo de 1938. El Ateneo Republicano de Castrillón, organizó recientemente un homenaje a José Fernandín al que acudieron sus descendientes que residen en el concejo.

«José Fernandín y sus colaboradores reaccionaron rápidamente ante el golpe de Estado. El jefe de puesto de Piedras Blancas de la Guardia Civil se marchó a Oviedo donde se sublevó. Las últimas actuaciones del alcalde socialista fueron organizar un concejo sumido en la guerra, organizar a los refugiados, abastecer a la población y convivir con las milicias», explica el historiador Pablo Martínez Corral, autor junto con Rubén Chimeno del libro «El Castrillón de la II República y la Guerra Civil».

José Fernandín emigró a Estados Unidos y retornó a Castrillón en 1906, año en el que abrió un establecimiento hostelero, el merendero Casa Alicia, en La Castañalona que aún sigue gestionando su familia. Asimismo, trabajó en la real Compañía Asturiana de Minas (RCAM) en Arnao empresa en la que fue elegido secretario del sindicato metalúrgico, según Pablo Martínez. «El bar de La Castañalona fue muy célebre porque las discusiones políticas estaban a la orden del día. Eran los tiempos del reinado de Alfonso XIII y del inicio de la dictadura de Primo de Rivera», explica el historiador castrillonense.

La entrada de las tropas franquistas en Castrillón obligó a José Fernandín a dejar el concejo y se embarcó en el vapor «San Juan de Nieva» pero fue apresado por los sublevados y conducido a la localidad de Camposancos (Galicia). Allí fue reconocido en enviado de nuevo a Asturias a finales del año 1937. Fue juzgado por rebelión e ingresó en la cárcel del Coto (Gijón). El 5 de marzo de 1938 fue fusilado en el cementerio gijonés de Ceares. Su familia corrió la misma suerte. «Su mujer Amanda desapareció y hoy, gracias a los archivos sabemos que murió cerca de donde su marido fue fusilado, en Ceares. Su hijo Fernando también fue procesado, juzgado y fusilado en el mismo lugar que sus padres unos meses más tarde», señala Pablo Martínez.

José Fernandín fue recuperado por la primera Corporación democrática que puso el nombre de Alcalde José Fernandín a la entonces calle principal de Piedras Blancas. En 1998, un grupo de castrillonenses fundaron la Asociación Cultural Alcalde José Fernandín y el PSOE local instituyó un premio con ese nombre.

El primer premio «Alcalde José Fernandín» lo recibió a título póstumo José Carlos Fueyo que presidió la Asociación Amigos del orfeón de Castrillón y Cáritas. En la segunda edición el galardón fue para la primera Corporación democrática salida de las elecciones municipales de 1979. La tercera edición del premio recayó en la asociación de discapacitados físicos de Avilés y comarca (Difac) y la siguiente para la ex senadora socialista, Nelly Fernández. En el año 2010 se entregó el, hasta ahora, último premio que fue para el sindicato SOMA-FIA-UGT. El Ateneo Republicano del concejo recogió el testigo y homenajeó hace unos días al último regidor republicano.

De pie, José Fernandín, Amanda y Fernando con una familiar.
De pie, José Fernandín, Amanda y Fernando con una familiar. reproducción mara villamuza



Las medusas retornan con el calor

La playa de Salinas se llenó ayer de medusas «clavel», cuya picadura apenas produce hormigueo. Las altas temperaturas registradas durante el fin de semana favorecieron la llegada de los animales marinos, que acompañaron a los bañistas junto a la orilla del mar. Sobre estas líneas, un ejemplar de medusa, ayer, en Salinas, informa I. MONTES.

 

domingo, 7 de octubre de 2012

Conjunto Histórico Industrial de Arnao

El 30 de abril de 1834, Nicolás Maximiliano Lescinne, un banquero belga, y los españoles Jose María Ferrer y Felipe Riera firmaron bajo notario los acuerdos de su sociedad. El capital de la Real Compañía Asturiana de Minas de carbón fue fijado en 450000 reales de vellón, y dividida en partes iguales. En principio la instalación de la sociedad en Arnao iba encaminada a la concesión de la licencia pertinente para la fabricación de cañones y otros armamentos para la marina de la guerra española, cometido que le fue asignado a la fábrica de Trubia, dedicándose durante estos años a la explotación de la mina de carbón de Arnao.
Durante los quince años siguientes de 1834 1849, la nueva sociedad no tenía grandes resultados, ya que la mayor parte de la producción del carbón se destinaba a consumo doméstico, no existiendo en la región ninguna tradición de consumo industrial del mismo. Además, la situación del emplazamiento hacía muy difícil su transporte. No obstante, la concesión minera obtenida por los belgas del Gobierno español era muy ventajosa para ellos, ya que implicaba una serie de privilegios, entre los que se encontraban las franquicias aduaneras para la importación de toda maquinaria y la exención de impuestos durante 25 años.

En mayo de 1851, Jules Hauzeur presenta un estudio concluyente sobre la necesidad de instalar una fundición de zinc en Arnao, aprovechando la calamina (silicato de zinc) de las minas de Cantabria y de blenda en Guipúzcoa y el carbón producido en Arnao. La ubicación más lógica de la industria del zinc es Arnao, ya que se precisaban siete toneladas de carbón por dos de mineral para producir una tonelada de zinc. Tenía que fundar una nueva sociedad que dispusiera de muchos más medios financieros para hacer frente a las fuertes inversiones, entrando en la misma nuevos capitales españoles y extranjeros.
En 1852 con la incorporación de Jonathan-Raphael Bischoffsheim se constituye en Bélgica la “Societe pour la production du zinc en Espagne” que dará lugar en 1854 al establecimiento en España de la Real Compañía Asturiana de Minas – sociedad para la producción de zinc en España. A finales de 1854 se produce la compra de los terrenos de las colinas y valles de Arnao para la instalación de la fundición, a la vez que presionaban sobre el gobierno español para conseguir la mejora del puerto de Avilés. También este año la compañía compra a la municipalidad el arenal del Espartal, que se extendía desde las colinas de Arnao hasta el puerto de Avilés, comprometiéndose la compañía fijar las dunas móviles mediante la plantación de pinos, evitando así que se aterrara la vía que pensaban construir para unir por ferrocarril la empresa y el propio puerto de Avilés, mediante la construcción de un túnel que atravesara la colina de Arnao. La producción de los hornos de zinc de Arnao comenzó el 15 de octubre de 1855 con una capacidad de 3000 ton/año.
El 8 de octubre de 1957 dada la positiva experiencia noruega con la producción de zinc electrolítico se establece la empresa “asturiana de zinc, sociedad anónima AZSA” participada al 50% por la Real Compañía Asturiana de Minas. La nueva compañía de zinc electrolítico de San Juan de Nieva tiene en 1960 una capacidad inicial de 15000 ton/año, capacidad que va aumentando progresivamente hasta las 320000 ton/año de la última década del s.XX
En 1983 la RCAM es absorbida por AZSA


Barrio de la Mina.
Castillete, Casino, Edificios Auxiliares, Playa y Tunel

El castillete de la mina, al margen de la calidad de su diseño, es el más antiguo de Asturias.
Desde 1831 ya existían descripciones del yacimiento subterráneo de Arnao, muy valorado por su gran espesor, que llevaban a afirmar en la época que “se veía asomar el carbón por todas partes”. El yacimiento carbonífero de Arnao y Santa María del Mar proporcionaba un carbón pobre, seco y poco bituminoso (lo que invalidaba su conversión en coque y su utilización en los hornos altos de la incipiente siderurgia asturiana), que le hacía altamente apropiado para el beneficio del zinc.
La importancia de la RCAM queda atestiguada en la visita que en 1858 realiza la reina Isabel II a sus instalaciones, en el transcurso del cual la soberana utiliza la línea férrea de la compañía y desciende a la mina de Arnao
En 1903 el criadero carbonífero de Arnao comienza a padecer las primeras dificultades, pues comienzan las primeras filtraciones de agua de mar. En el año de 1905 se produce una gran filtración de 2000 a 3000 metros cúbicos por día, reduciéndose la explotación sólo a las capas de carbón que se encuentran por encima del nivel del mar. En 1915 cuando los trabajos se encontraban a 500 metros de la costa, ante una filtración de agua de mar se inundó completamente, teniendo que ser abandonada para siempre.
El casino de Arnao fue construido hace más de cien años por la Real Compañía Asturiana de Minas (RCAM) y actualmente está incluido en el Inventario del Patrimonio Cultural de Asturias dentro del conjunto histórico industrial de Arnao. Es un edificio de planta rectangular que está emplazado sobre el acantilado de la zona occidental de la playa. El edificio está alineado con el castillete de la mina y la sala de máquinas. La cubierta está realizada en cinc y gran parte de las paredes son de ladrillo macizo.

La Real Compañía Asturiana de Minas era una empresa paternalista que, como la avilesina Ensidesa, aspiraba a cubrir el tiempo libre de sus empleados. Construyó el casino de Arnao, con teatro incluido para los obreros.
Lo que hoy es la zona en la que está situada la playa hace 400 millones de años era punta de lanza del continente de Godwana y estaba situada al sur del trópico de Cáncer. Temperaturas y aguas cálidas, zona desértica sobre la plataforma continental y una vida en ebullición bajo el mar de la que hoy sólo quedan restos en forma de fósiles. Esta zona era un arrecife de mares cálidos con una gran cantidad de organismos que debido al proceso geológico derivó en un choque continental que provocó los curiosos pliegues de las rocas de Arnao. En medio de esta situación, llegaría la época del Carbonífero, en la que, ya con vegetación poblando el continente, se produjo un fenómeno que derivó en la formación de betas de carbón.


Barrio de la Fábrica.
La Casona, Escuelas del Ave María, Residencia de Invitados, Casas de Ingenieros, Viviendas Unifamiliares, Cuarteles, Parque y Garages, Casa del Químico, Laboratorio, Oficinas RCAM, Economato, Hospitalillo
La Casona. Es el edificio residencial de mayor envergadura del concejo emplazada en un promontorio junto al mar, dominando visualmente las instalaciones fabriles y el poblado, lo que logra un eficaz impacto visual y escenográfico que le confiere un cierto rasgo palaciego.
El bloque delantero se construyó hacia 1880, el posterior es más tardío, 1903.
Está formado por dos bloques de planta rectangular, orientados de Este a Oeste, dispuestos en paralelo y unidos por un corredor transversal volado. El bloque delantero se construyó en primer lugar, y está resuelto en un estilo neorrenacentista.. Alcanza tres pisos de altura y se cubre a dos aguas. Quizás algo austero y monótono en el diseño de sus fachadas lo que evidencia un eco de construcción fabril, la fachada es muy horizontal; de composición simétrica, privilegia la calle central destacándola con el remate en el astial apuntado.

La puerta y las ocho ventanas del bajo son en arco de medio punto, y las del principal, a eje con las anteriores, en arco escarzono. Sobre la puerta destaca un balcón volado, corrido con balaustrada de zinc, soportado por cuatro grandes mensulones, que se corresponde en el último piso con tres balcones menores. Los tres huecos del ático, se cierran con dintel. Los marcos son moldurados; este enmarque se realiza en chapa de zinc, enmascarado con pintura rojiza para sugerir un marco de ladrillo. Hacia el lateral oeste aparece una terraza descubierta, con balaustrada. A continuación, se incorpora, muy retrasado respecto al plano de la fachada el pequeño volumen de la capilla, con ventana triple en medio punto peraltado, de lejana inspiración prerrománica, culmina en pequeña espadaña de madera.

El bloque posterior es de concepción más sencilla y tiene bajo casi en semisótano, piso y bajo cubierta abuhardillado. Presenta dos entredós (al norte y al oeste), con escaleras que conducen al piso alto, protegidas por tejadillo (hace pocos años conservaban los anticuerpos acristalados, tratados como miradores que las protegían del viento) y como única fuente de luz y ventilación de la planta inferior una serie de ojos de buey. Todos los vanos de este cuerpo se enmarcan con ladrillo, material con el que se destacan las impostas y esquinas. Las dos vertientes del tejado están coronadas por mansardas francesas, cilíndricas.
Entre ambos edificios, el patio rectangular, abierto en los dos lados cortos hacia los antiguos jardines. El corredor transversal abierto en un ventanal cuádruplo en el centro, con pilastrillas, balaustres y pequeño frontón, comunica con un puente tendido a la altura del piso primero las dos estructuras. Las cubiertas, los aleros, los recercos, los balaustres y la mayoría de los detalles decorativos son de zinc.

Escuelas del Ave María.  A principios del siglo XX, en el ámbito empresarial, imperaba el “paternalismo”, es decir, las empresas trataban de cubrir todas las necesidades de sus obreros, Alimentación: Se crearon los economatos. Salud: Las empresas tenían médicos y hospitales que atendían tanto a sus obreros como a las familias de estos. Ocio: Casino, cine, campo de futbol. Educación: Escuelas.
La finalidad última de la escuela era educar a su futura fuerza laboral, y de paso, poner freno a las ideologías obreristas y revolucionarias.
Pero al fin y al cabo, educación es educación y en este sentido, los niños de Arnao, fueron unos privilegiados, en un país donde el índice de analfabetismo se acercaba al 70 %, en Arnao no había analfabetos.
La Empresa, desde la fundación de las Escuelas, en 1913, se ocupó de su mantenimiento y dotación, haciendo gala de no escatimar esfuerzos para que la educación fuese excelente, consiguiendo que las Escuelas del Ave María fuesen un referente de la época en cuanto a su calidad educativa.
Seguían las teorías del padre Manjón: educación campestre, humana, práctica, libre, patriótica, cristiana, gratuita, popular y fomentadora de vínculos sociales.

Las clases en Arnao, siempre fueron mixtas, eso sí, los niños a un lado y las niñas a otro, algunas actividades eran exclusivas de niños o de niñas, por ejemplo a las niñas se las enseñaba a bordar, y en la Fiesta del Árbol, se hacia una exposición con los trabajos del curso. Los niños durante la posguerra desfilaban en el patio con mosquetones de madera, y por parejas hacían guardia ante la Cruz de los caídos.
Otras actividades aparte de las clases, también eran mixtas, el coro, las excursiones..
El conjunto escolar consta de un edificio principal y dos menores de ladrillo macizo visto que estuvieron dedicados a parvulario. La escuela adopta planta en forma de cruz. La cubierta es en todos a dos aguas, con chapa de zinc. Se levanta sobre un semisótano, delimitado por una línea en resalte e iluminado por ojos de buey con enmarque de ladrillo. En las alas, las aulas abren al exterior dos amplias ventanas en cada lado, con vanos separados por finas pilastras de ladrillo, alféizar corrido, moldurado y dintel resaltado que se decora con piezas alargadas de mortero de cemento a modo de capitel.

En todo el exterior el ladrillo se deja visto. Como recurso decorativo se juega con una discreta bicromía (piezas de tono más claro junto a otras oscuras) y con la colocación, formando hiladas en las que alternan los dispuestos longitudinalmente con los transversales. En el edificio prima lo funcional y utilitario sobre la vertiente estilística o decorativa.
En los patios traseros se dispone un amplio repertorio de cuadros didácticos, realizados en relieve en el suelo, en los que aparece un mapamundi, el mapa de España, el de Asturias, la rayuela, los números romanos, un reloj, figuras geométricas y un cuadro de gramática.

Viviendas.  Las casas de los obreros, de diferentes tipologías y construidas entre los años 1880 y 1903. Son unifamiliares, yuxtapuestas dos a dos o formando alineaciones, de dos pisos y con un pequeño patio delantero; algunas con huerta detrás. Parte de ellas cuentan con un elemento típico de la arquitectura tradicional asturiana: el corredor de madera. En Arnao llegaron a trabajar, entre la mina y la fábrica, unos 800 obreros. Cabe destacar la diferencia entre las viviendas de los obreros, los empleados y los ingenieros.
Curiosamente, la empresa no construyó nunca una iglesia en el poblado de Arnao, al contrario de lo que era habitual.

jueves, 4 de octubre de 2012

La vida bulle en el cañón de Avilés

Los científicos que investigan los fondos marinos del Cantábrico descubren singulares arrecifes de coral de aguas frías a dos kilómetros de profundidad

Avilés, Amaya P. GIÓN
Dicen los científicos que encontrar arrecifes de coral en aguas frías es como buscar una aguja en un pajar. Quizás eso aporte un valor añadido al descubrimiento de los investigadores del Instituto Español de Oceanografía (IEO) que analizan estos días el cañón de Avilés a bordo del laboratorio flotante «Ángeles Alvariño», recién estrenado. Los científicos han localizado arrecifes de coral en esta compleja y extraordinaria sima submarina en la que proliferan también otras especies propias de los fondos marinos. Corales de aguas frías, agregaciones de esponjas y erizos de profundidad son algunas de las especies que han descubierto los científicos del IEO a casi dos kilómetros bajo la superficie del mar. La vida bulle en el cañón de Avilés.
Las malas condiciones de la mar obligaron al buque «Ángeles Alvariño», que partió del Musel gijonés el pasado 24 de septiembre, a regresar a tierra. Los científicos que participan en la última campaña del proyecto «Indemares» aprovecharon este paréntesis para presentar sus últimos descubrimientos. «Localizamos comunidades de corales de aguas frías y agregaciones de esponjas de profundidad protegidas por las normativas europeas. Existe una gran biodiversidad asociada a este cañón, tiene una producción biológica muy alta», explicó el director del Instituto Oceanográfico de Santander, Francisco Sánchez.
El robot «Liropues 2000», el único vehículo submarino no tripulado capaz de operar a profundidades de 2.000 metros, y un sofisticado trineo fotográfico permitieron a los investigadores observar e inmortalizar jardines de corales poblados por brisinguellas, unas estrellas de mar propias de estos arrecifes que se alimentan de materia orgánica conocida como nieve marina. Esponjas, cangrejos y peces propios de las profundidades proliferan en los fondos del cañón. «Es sorprendente que a tanta profundidad y en aguas frías (unos ocho grados de temperatura) puedas ver tanta biodiversidad como si estuvieras buceando por una zona tropical», añadió Sánchez.
El «Ángeles Alvariño» partió ayer de nuevo del puerto gijonés rumbo al cañón de Avilés, donde continuarán las investigaciones hasta el próximo lunes. No será hasta 2013 cuando se den a conocer las conclusiones definitivas que permitirán establecer si esta gran sima abisal pasa a formar parte de las áreas marinas protegidas de España.

un bosque animal. El fondo del cañón de Avilés constituye una especie de bosque de animales (a tanta profundidad resulta imposible la vida vegetal). En las dos primeras fotos se pueden apreciar multitud de brisinguellas sujetas a los corales. A la derecha, dos erizos de mar de profundidad, entre los corales.
un bosque animal. El fondo del cañón de Avilés constituye una especie de bosque de animales (a tanta profundidad resulta imposible la vida vegetal). En las dos primeras fotos se pueden apreciar multitud de brisinguellas sujetas a los corales. A la derecha, dos erizos de mar de profundidad, entre los corales. 

miércoles, 3 de octubre de 2012

Un tesoro natural en las profundidades del Cañón de Avilés

Arrecifes de coral, estrellas de mar gigantes y algunas especies aparentemente "desconocidas" han sido halladas a siete millas de la costa asturiana

EFE Investigadores del Instituto Español de Oceanografía han hallado un escenario de biodiversidad de "riqueza extraordinaria" en las simas del Cañón de Avilés, en el mar Cantábrico, que posibilitaría la declaración de Área Marítima Protegida en algunos de sus enclaves.
Grandes extensiones de arrecifes de coral, incluso negro, esponjas, y estrellas de mar gigantes con hasta diez brazos, son algunas de las especies descubiertas a una profundidad de entre 200 y 1.300 metros a siete millas de la costa de Avilés, según ha informado hoy el director del centro Oceanográfico de Gijón, Francisco Javier Cristobo.
La investigación se ha realizado a bordo del buque Ángeles Alvariño por un equipo compuesto por doce investigadores y catorce tripulantes que han utilizado tecnología punta para capturar imágenes y tomar muestras a profundidades de más de mil metros.
El robot Linopus 2000 ha conseguido grabar en vídeo imágenes de los fondos marinos y tomar muestras de la flora y fauna hallada a profundidades hasta hace poco impensables, según ha informado el jefe de la expedición, Francisco Sánchez.
El trineo TFS-2, que trabaja a dos metros por encima del fondo marino remolcado por el buque, ha sido utilizado para tomar fotografías en secuencias de un fotograma cada diez segundos e imágenes de vídeo.
El material visual ha permitido elaborar un inventario de especies, entre las cuales existen algunas aparentemente "desconocidas", que ahora es necesario identificar y clasificar.
El Cañón de Avilés es un valle submarino ubicado a siete millas de la costa asturiana, que encierra una orografía singular con cadenas montañosas que oscilan entre los 140 y los 4.700 metros de profundidad.
Está formado por tres cañones, el de Avilés propiamente dicho y otros dos de menores dimensiones que han sido denominados La Gaviera y Corviro.
La riqueza de la flora y fauna detectada en la primera fase de la investigación permitiría que algunos enclaves puedan ser declarados Área Marítima Protegida, según ha informado el jefe del grupo en una rueda de prensa celebrada hoy a bordo del buque oceanográfico.
El Ángeles Alvariño iniciará mañana, jueves, la segunda fase de la investigación, en la que se intentará sondear hasta a 1.700 metros de profundidad y que se enmarca dentro de la campaña Indemares, destinada a la localización de espacios susceptibles de ser incluidos en regímenes de protección.

El buque Ángeles Alvariño en Gijón. /
El buque Ángeles Alvariño en Gijón. / 

lunes, 1 de octubre de 2012

La temporada de playas cierra con más de 1.500 intervenciones de salvamento

Los socorristas registraron 572 incidencias más que el año pasado y la afluencia en los arenales del concejo superó el millón de usuarios
Salinas, Mónica G. SALAS
El personal del servicio de salvamento de Castrillón efectuó este verano un total de 1.512 intervenciones en las playas del concejo, 572 más que en la temporada pasada. El buen tiempo propició que la afluencia de bañistas en 2012 también fuera superior. «Sobre todo se notó en los arenales más pequeños», indica el coordinador de Servicio municipal de salvamento y socorrismo, Ignacio Flórez.

Así, según los datos hechos públicos ayer, entre el 9 de junio y el 9 de septiembre se contabilizaron más de un millón de bañistas. De los 1.108.504 usuarios, 388.535 se correspondieron con la playa de El Espartal. El mes con mayor actividad fue agosto con casi 800 intervenciones. En ese período, «casi se duplicaron los datos registrados en 2011», asegura Flórez.

La mayoría de las incidencias de este año se debieron a lesiones producidas por animales marinos, sobre todo de «pez escorpión». En concreto, los 36 socorristas de Castrillón asistieron a 832 usuarios, 365 más que el verano pasado. En general, las playas del concejo registraron una mayor actividad que en 2011. En este sentido, se atendió a 341 bañistas por heridas y contusiones y 147 por animales terrestres. Con respecto a los rescates por socorrista, se produjeron 49, de los cuales 29 tuvieron lugar en la playa de El Espartal. Los rescates con embarcación fueron 25, repartidos entre El Espartal con 23, y Salinas con dos. El único caso de insolación se produjo en Arnao.

El mayor número de intervenciones, 523, se produjeron en la playa de El Espartal. Le siguen San Juan, con 305, y Salinas, con 183. Con menor actividad se encuentran Salinas, con 183, Santa María del Mar, con 169 y Bayas con 140.

La temporada oficial del plan Salvamento en Playas (SAPLA) que todos los veranos pone en marcha el Principado con la colaboración de los ayuntamientos costeros, concluyó el pasado domingo 9 de septiembre.