Los buzos hallan restos humanos envueltos en redes entre el "Santa Ana" y unas rocas

Salvamento Marítimo da por hecho que los tejidos son del único tripulante desaparecido, el gallego Manuel Tajes - La identificación mediante el cotejo de muestras de ADN, que se realiza en Madrid, puede tardar semanas

07.04.2014 | 12:11

Amaya P. GIÓN Buzos de Salvamento Marítimo localizaron ayer restos humanos envueltos en redes en el entorno del "Santa Ana", el pesquero que encalló el pasado 10 de marzo entre la isla de la Erbosa y la Corberona, frente a la costa de Peñas.Los restos han sido analizados esta mañana en el Instituto de Medicina Legal de Oviedo y estos exámentes han concluido que "parecen humanos". Hoy mismo serán enviados al Instituto de Toxicología de Madrid donde se realizarán pruebas de ADN. Los coordinadores de la operación de búsquedade sus nueve tripulantes, Salvamento Marítimo,dan por hecho que pertenecen al único pescador que continuaba en paradero desconocido, el mecánico gallego Manuel Tajes. Las fuentes consultadas apuntan que la identificación de la persona a la que corresponden esos restos requerirá del cotejo de muestras de ADN, unas pruebas que se realizan en Madrid y cuyo resultado puede tardar semanas.

Buzos de Salvamento Marítimo y del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil (GEAS) retomaron el sábado las inmersiones en el entorno del "Santa Ana", una vez que las condiciones del mar lo permitieron. Los especialistas localizaron en torno a la una y media de la tarde de ayer restos humanos que podrían ser de Manuel Tajes "en el fondo marino, enredados en aparejos, entre el pecio y unas piedras".

La fuerza del mar ha movido en los últimos días el pecio, que se encontraba en posición vertical y encajado en el fondo por la popa. En las inmersiones realizadas este fin de semana, los buzos comprobaron que el pesquero, de 35 metros de eslora, está ahora totalmente apoyado en el lecho marino sobre el costado de babor y separado treinta metros de la piedra en la que antes estaba encajado por su zona de popa, comunicó Salvamento Marítimo a través de una nota de prensa.

Los restos hallados fueron trasladados en la embarcación "Salvamar Rigel" a los muelles de San Juan de Nieva del puerto de Avilés, donde fueron inspeccionados por una forense. Según fuentes próximas al caso, resulta imposible determinar a quién pertenecen, por lo que todo apunta a queserá necesario realizar las pruebas de ADN.

El buque embarrancó y se hundió hace 28 días, de madrugada, frente a la costa de Peñas con nueve personas a bordo. Había partido del puerto pesquero avilesino a la campaña de la xarda. Sólo uno de los tripulantes logró sobrevivir al naufragio, el gallego Manuel Simal Sande. Otros dos, Francisco Gomes Fragateiro y Manuel Indalecio Mayo-Brea, fueron localizados esa misma mañana, ylos seis restantes permanecieron desaparecidos durante días.

Los buzos recuperaron el 14 de marzo, cuatro días después del naufragio, el cadáver del gallegoLucas José Mayo Abeijón, que se encontraba en la zona habitable del pesquero, entre la cocina y el comedor. Al día siguiente localizaron otro cuerpo en la zona de camarotes, que fue identificado como el indonesio Suherman Hasa. El 16 de marzo los buzos consiguieron rescatar los cuerpos del asturiano Marcos del Agua Chacón, alumno en prácticas, y del indonesio "Wasito", que permanecían atrapados en la zona de popa del "Santa Ana".

La búsqueda en el interior del pecio concluyó el 18 de marzo, una vez que los buzos confirmaron que dentro del barco hundido no quedaba nadie. Pero los trabajos de rastreo continuaron por el entorno del buque, y también por tierra y aire. Un vecino del municipio cántabro de Suances localizó el 26 de marzo en la playa de la localidad el cuerpo del portugués Vitor José Farinhas Braga (su identificación fue posible tras obtener una huella dactilar y realizar un cotejo dactiloscópico).

Las pruebas de ADN, según las fuentes consultadas, determinarán si los restos localizados ayer en las proximidades del pesquero son del único tripulante que permanece en paradero desconocido, el mecánico gallego Manuel Tajes.